lunes, 11 de octubre de 2021

Las estrellas

 


¿Alguna vez te has fijado en los distintos colores de las estrellas? En el cielo podemos encontrar miles de estrellas brillando, aunque cada una lo hace con diferente intensidad en función de su tamaño, de su “edad” o de su distancia a nosotros. Pero si nos fijamos con detenimiento o las observamos a través del telescopio veremos que, además, las estrellas pueden tener diferentes colores o tonalidades, desde el rojo hasta el azul. Así pues, encontramos estrellas más azules o estrellas más rojas. Este es el caso de la brillante estrella Antares, cuyo nombre significa precisamente “el rival de Marte”, puesto que compite con el intenso color del planeta rojo.

 

Por qué las estrellas tienen diferentes colores

El color de las estrellas depende básicamente de la temperatura de su superficie. Así pues, aunque parezca un poco contradictorio, las estrellas azules son las más calientes; y las rojas, las más frías (o, mejor dicho, las menos calientes). Si recordamos el espectro lumínico, que casi todos hemos estudiado en el colegio de pequeños, entenderemos fácilmente este aparente contrasentido. Según el espectro electromagnético, la luz ultravioleta es mucho más intensa que la luz infrarroja. Así, el color azulado implica radiaciones más intensas, más energéticas y, por tanto, corresponde a temperaturas mayores.

Así, en astronomía, los colores de las estrellas varían en función de su temperatura y también de su edad. En el cielo encontraremos estrellas de color blanco-azulado o estrellas de color anaranjado o rojizo. Por ejemplo, la estrella Bellatrix, de color azul, tiene una temperatura superior a 25.000 grados Kelvin. Mientras que estrellas rojizas como Betelgeuse apenas alcanzan los 2.000 K.

Clasificación de las estrellas según su color

En astronomía se clasifica a las estrellas en 7 categorías diferentes según su color y tamaño. Estas categorías se representan por letras y se subdividen a su vez en números. Por ejemplo, las estrellas jóvenes (más pequeñas y calientes) tienen un color azulado y se catalogan como estrellas de tipo O. Por otro lado, las estrellas más viejas (más grandes y frías) se clasifican como estrellas de tipo M.

Nuestro Sol es una estrella de tamaño medio y color amarillento. Su temperatura en la superficie es de unos 5000-6000 grados Kelvin y se considera una estrella de categoría G2. Según envejezca, el Sol irá aumentando su tamaño y se irá enfriando mientras se vuelve cada vez más rojiza. ¡Pero para eso aún quedan varios miles de millones de años!

El color de las estrellas indica su edad

Además, el color de las estrellas nos da una idea de su edad. Así las estrellas más jóvenes tienen una tonalidad más azulada y las estrellas más viejas, más rojiza. Esto es debido a que cuanto más joven es una estrella, mayor energía genera y mayor temperatura alcanza. Por el contrario, cuando las estrellas van envejeciendo, generan menos energía y su temperatura disminuye hasta colores más rojizos. Sin embargo, esta relación entre su edad y su temperatura no es universal ya que depende del tamaño de las estrellas. Si una estrella es muy grande, consumirá su combustible más rápidamente y se volverá rojiza en un tiempo más corto. En contra, las estrellas de menor masa tienen una “vida” más larga y tardarán más en abandonar su color azul.

Fuente: https://astroaficion.com/2012/04/23/los-colores-de-las-estrellas/


ACTIVIDAD

1- ¿Qué es una estrella?

2-¿ Cómo nacen las estrellas?

3-¿Por qué presentan diferentes colores?